El forro polar de Holanda es conocido por su durabilidad y facilidad de cuidado. Es resistente al encogimiento, las arrugas y las bolitas, y se puede lavar y secar a máquina sin deformarse ni perder forma. Esto lo convierte en una opción práctica para el uso diario en textiles para el hogar, mantas y prendas de vestir.
El nombre "vellón holandés" proviene del hecho de que la tela se desarrolló originalmente en los Países Bajos, donde se usaba principalmente para ropa de invierno y mantas. Sin embargo, hoy en día se produce en muchos países y se utiliza en una amplia variedad de aplicaciones.
El forro polar Holland está disponible en una variedad de colores y patrones, por lo que puede encontrar fácilmente un estilo que se adapte a sus necesidades. Se usa comúnmente para hacer cortinas, mantas y cojines, y varios artículos decorativos. Su suave textura afelpada también lo convierte en una opción popular para artículos para bebés y niños.